Se dice que el Wapach es un ser gigante, tan alto que un hombre normal no le alcanzaría ni a las rodillas. Además, «entra a las poblaciones a media noche y, plantándose como un tremendo coloso, con un pie en cada lado del camino, captura a algún incauto transeúnte fracturándole las piernas con los dientes o causándole un desmayo repentino».
Otras versiones mencionan que el Wapach realiza su ataque apretando con sus piernas la garganta de sus victimas hasta ahogarla.
Fuente: Sergio Grosjean Abimerhi, autor de El Gran Libro de Yucatán.