El encantador pueblo mágico de Yucatán con una gastronomía impresionante

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Por Miranda Heredia

Maní, un pintoresco pueblo en el estado de Yucatán, es un lugar poco conocido que cautiva a los visitantes con su encanto y su extraordinaria gastronomía. Aunque no es un destino muy popular entre los turistas internacionales, en la península de Yucatán es famoso por dos razones principales: su increíble poc chuc, que muchos consideran el mejor del mundo, y su distinción como Pueblo Mágico, un reconocimiento otorgado a los pueblos más encantadores de México.

Maní tiene una rica historia y es uno de los pueblos más antiguos de la península que sigue habitado. Su nombre, «Maní», significa «lugar donde ocurrieron cosas importantes» en lengua maya. Una parte de la población de Uxmal se trasladó aquí en busca de agua y descubrió un cenote en el centro del pueblo, convirtiéndose en un asentamiento crucial.

Actividades y atractivos en Maní

  1. Gastronomía: La cocina de Maní es excepcional, con el poc chuc como plato destacado. Este delicioso platillo de carne de cerdo marinada y asada es famoso en toda la región y ha ganado premios de la Organización Mundial del Turismo (OMT).
  2. Historia y cultura: Maní tiene una gran riqueza histórica. Puedes visitar la iglesia y convento de San Miguel Arcángel, un impresionante edificio colonial que data del siglo XVI. Este sitio es un testimonio del pasado colonial de la región y ofrece una experiencia inmersiva en la historia y cultura local.
  3. Cenote en el corazón del pueblo: Este cenote es un elemento esencial de la comunidad de Maní, siendo un punto de encuentro y una fuente de agua vital desde tiempos antiguos.
  4. Artesanías locales: Los artesanos de Maní son conocidos por sus productos únicos, incluyendo bordados y textiles que reflejan la rica herencia cultural de la región.

Maní es un destino ideal para aquellos que buscan una escapada tranquila y cultural, con la oportunidad de disfrutar de una gastronomía espectacular y descubrir la historia profunda de Yucatán. Visita Maní antes de que se vuelva demasiado popular y pierde su encanto original.